La cultura del té está profundamente arraigada en muchos países del mundo, sobre todo en el continente asiático. Esta bebida, inspiradora y reconfortante, tiene sus orígenes legendarios en la China del siglo III a.C. A continuación te contamos cuáles son algunos de los mejores lugares del mundo para beber té:
China
Es el lugar de origen del té y ofrece una experiencia única para los amantes de esta bebida. Según la historia popular, el emperador Shen Nong, uno de los personajes principales de la mitología china, descubrió la bebida por casualidad al caer unas hojas de té en agua caliente. Desde ese momento, Shen Nong se convirtió en una verdadera divinidad de la medicina herbal china.
Lugares como Hangzhou (hogar del famoso té Longjing), Fujian, Yunnan y Guangdong ofrecen paisajes impresionantes y una rica tradición del té.
El té es apreciado por su sabor, aroma y propiedades medicinales, y se consumen variedades como el té verde, té oolong, té negro y té blanco. En un viaje a China no dejes de visitar las plantaciones de té de Hangzhou, sus casas de té y sus jardines que ofrecen entornos serenos para disfrutar de esta bebida.
En China el té es un símbolo de hospitalidad y unión. La variedad más consumida y más popular es el té verde, parte integral de la cultura china durante miles de años.
India
India es el segundo mayor productor de té del mundo después de China. En India el té es también parte integral de la cultura y se considera una bebida integradora.
Con una diversidad de tés que van desde el chai hasta el Darjeeling y Assam, India es un paraíso para los amantes del té. Lugares como Darjeeling, Assam y Munnar ofrecen experiencias únicas en plantaciones de té impresionantes.
El chai es una mezcla de té negro, especias (como canela, cardamomo, jengibre y clavo), leche y azúcar. Se hierve todo junto en una olla especial llamada «kadai» para crear una infusión aromática y reconfortante. Se sirve en vasos pequeños y se consume en toda India, desde las calles hasta los hogares.
El Masala Chai es una variante del chai común pero con una mezcla de especias más intensa. Se prepara con ingredientes adicionales como anís estrellado, pimienta negra o nuez moscada, dándole un sabor más picante y complejo.
Sri Lanka
Sri Lanka es conocido principalmente por el té de Ceylán. Las plantaciones de té en lugares como Nuwara Eliya y Ella ofrecen hermosas vistas y recorridos por las plantaciones. El proceso de cultivo, recolección y elaboración del té es una parte crucial de la economía y la historia de Sri Lanka.
El té es una parte de la cultura de Sri Lanka y se bebe de diversas formas en todo el país. El que se consume mayormente es el té negro de Ceylán, pero también se disfrutan otras variedades como el té verde y el té blanco.
Marruecos
El té es parte central de la cultura marroquí. Se prepara con hojas de té verde, menta fresca y azúcar. Los mercados y cafés en ciudades como Marrakech, Casablanca o Fez ofrecen la oportunidad de disfrutar de esta bebida en ambientes vibrantes y pintorescos.
La práctica de beber té en Marruecos es un ritual tradicional y meticuloso. El proceso de verter el té desde cierta altura para crear espuma es una antigua costumbre en Marruecos. El té simboliza la generosidad hacia los invitados y fomenta la interacción y el sentido de comunidad. Si viajas a Marruecos, empápate de la cultura del té, y nunca rechaces una invitación a tomar esta bebida, pues se considera de mala educación.
